Mientras despegaba la mañana del domingo, camino a transformarse en mediodía, largó la XV reedición del histórico premio en la esquina del café La Biela, ubicado en el barrio porteño de Recoleta. Horas después, la bandera a cuadros bajó a la vera del Río de la Plata, en Tigre y puso fin a otro encuentro que busca mantener vivo el espíritu de los pilotos que crearon el certamen, hace ya más de cien años. Esta vez, participaron más de 70 vehículos entre triciclos, motos y automóviles que funcionan a nafta, vapor o electricidad y fueron fabricados hasta 1917.
En ese marco, el secretario del Club de Automóviles Clásicos, Guillermo Viacaba dijo a la prensa que “es un gran placer y un inmenso gusto estar en este lugar incomparable. Hace 15 años, el CAC rescató del olvido la primera carrera en ruta de Argentina y casi con seguridad de Latinoamérica, un evento importante para el país y el deporte automotor. El municipio de Tigre siempre ha acompañado incondicionalmente esta recreación histórica, por eso mi enorme agradecimiento y el del club, porque siempre tuvimos un eco enorme y una colaboración sin límites.”
El recorrido fue por las avenidas Figueroa Alcorta, Udaondo y Del Libertador atravesando la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los partidos de Vicente López, San Isidro y San Fernando, para luego tomar Cazón y Paseo Victorica. Sobre la pista, un Daimler Roger Phaeton de 1887 fue el automóvil más antiguo. Lo acompañaron por el asfalto, por ejemplo, un Cadillac 1904, varios Ford T construidos entre 1908 y 1914, un Rochester Splindleast de 1901, varios Hudson, Panhard Levassor 1909, un Imperia Spider 1909 y un Metz 1908, entre otros.
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