Ambos países llegaron a un entendimiento para delinear un nuevo tratado de comercio automotriz, por el cual, se impone un cupo de importaciones del país azteca de 600 millones de dólares por un período de tres años, lo que reducirá un 33% la compra de autos de ese país en los primeros doce meses.
Asimismo, si las terminales exportan unidades argentinas en un mismo nivel de lo que importan, no deberán pagar arancel aduanero.
Los modelos que Argentina exporta a México son la Ford Ranger, Toyota Hilux y Volkswagen Amarok; la Mercedes-Benz Sprinter y el Renault Kangoo. Por otra parte, los que llegan al país proveniente de las tierras aztecas son: Chevrolet Avego G3; Dodge Journey; Fiat 500; Ford Fiesta KD; Honda CR-V; Nissan NP300, March, Sentra, Tiida y Versa (a llegar); y Volkswagen Beetle (a llegar en 2013), Bora y Vento.
De la cumbre, celebrada en la capital mexicana, participaron, entre otros, la ministra de industria Débora Giorgi, su par mexicano Idelfonso Guajardo, y Cristiano Ratazzi, presidente de ADEFA y de Fiat Argentina.
Este anuncio llegó luego de que en junio pasado, el Gobierno Nacional tomó la decisión de suspender mediante un decreto el Acuerdo de Complementación Económica (ACE), entre nuestro país y México. Como consecuencia, las unidades provenientes de esas tierras recibieron un incremento automático del 35% de arancel aduanero.
Por último, para hoy está previsto que México retire los cuestionamientos respecto de Argentina que había realizado ante la Organización Mundial de Comercio (OMC).
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