Por las calles del viejo continente circulan, como habíamos anticipado, una ascendente cantidad de autos con baterías de ion de litio. Sin embargo, durante toda esta semana, los empedrados de Valladolid, España fueron testigos de un suceso histórico. El primer taxi eléctrico, un Nissan Leaf color blanco, está en funcionamiento. Pionero, y por ahora único, el conductor Roberto San José ha instalado la base de recarga en su hogar y aseguró que “en ocho horas llena el 80 por ciento de la batería, lo que da una autonomía de 120 kilómetros”.
Su nuevo instrumento de trabajo, que alcanza una velocidad de 140 km/h y tiene un propulsor de 80 kilowatios (equivalentes a 10.8 CV), le costó 36.600 euros y para la compra recibió un aporte de 6 mil euros proveniente del Ministerio de Industria. Hasta el lunes, trabajaba con un vehículo Volkswagen por el cual pagó 28.000, apenas más barato. Respecto a la experiencia, el taxista afirmó que “no hay problemas, porque existen puntos de carga en las calles”. Luego señaló que, si bien las estaciones que hay funcionan, habría que incrementar la cantidad porque «no sería interesante que cada coche tenga su cargador, como ha pasado con los teléfonos móviles». Por último, se mostró optimista
para poner a prueba el vehículo. «Se supone que el motor tiene que
durar más que el de un coche convencional”, concluyó.
Pensar a veces no está tan mal y si vemos obvios los hábitos extraños del fulano… lo que nos declive acatar los nuestros un ademán