Actualmente la relación entre un automóvil y su conductor se trata simplemente de que justamente el mismo usuario utilice su automóvil. No existe ningún otro tipo de interacción entre quien maneja y su vehículo.
Quienes son amantes de las películas futurísticas y de ciencia ficción seguramente alguna vez habran soñado con autos voladores, coches parlantes o por que no vehículos que puedan transformares. Aparentemente ese sueño a futuro es mas cercano de lo que muchos imaginan. Probablemente falta mucho para ver un automóvil que se transforme pero no falta tanto para poder dialogar o interactuar con los autos del futuro.
Se prevé que aproximadamente el 90% de los vehículos que se fabricaran para el 2022 ofrezcan sistemas de reconocimiento de voz. El siguiente paso para los vehículos del futuro podría ser reconocer pequeños cambios en nuestras expresiones faciales, así como modulaciones e inflexiones en nuestra voz, facilitando la experiencia de conducción para los consumidores.
Fatima Vital, Director Senior de Marketing Automotive, Nuance Communications, quien ayudó a Ford a desarrollar el reconocimiento de voz de SYNC dentro del vehículo, expresó que no es tan lejana la idea sobre estos autos futurísticos. «Estamos en el camino correcto para desarrollar el vehículo empático que podría decir una broma para animarte, ofrecerte consejos cuando lo necesitas, recordarte los cumpleaños y mantenerte alerta en un viaje largo».
Los sistemas avanzados, equipados con sofisticados micrófonos y cámaras dentro de los vehículos, podrán aprender qué canciones nos gusta escuchar cuando estamos estresados y aquellas ocasiones que preferimos simplemente disfrutar del silencio. La iluminación interior también podría complementar y adaptarse a nuestro estado de ánimo.
Las marcas ya están en marcha para poder lograr un nuevo avance en la industria automotor. Por ejemplo Ford está ejecutando junto a RWTH Aachen University, un proyecto de investigación para incrementar el uso de micrófonos múltiples que mejoren el procesamiento del habla y reduzcan el efecto del ruido externo y posibles interrupciones. Dentro de los próximos dos años, los sistemas de control de voz podrían ayudarnos de la misma forma que lo hace un asistente personal.
Sé el primero en comentar