Land Rover puso a prueba el Range Rover Sport para averiguar sobre qué superficie su SUV más deportivo acelera mejor.
Un dato que nunca falta en la ficha técnica de un vehículo es el tiempo que tarda en acelerar de 0 a 100 km/h. Este número, que sirve para demostrar el poder de aceleración del auto en cuestión se obtiene luego de hacer la prueba sobre asfalto y en condiciones reales.
Esta vez, Land Rover quiso averiguar ese tiempo sobre distintos terrenos. El modelo elegido fue el Range Rover, en su versión más deportiva, la Sport SVR. Esta variante cuenta con un motor naftero V8 sobrealimentado, de 5.0 litros y 550 CV. En asfalto, este SUV aceleró en 4,7”.
Pero es más sorprendente su capacidad de aceleración sobre superficies con niveles de adherencia más bajos. Sobre caminos de ripio, el Range Rover sólo necesitó seis décimas más, al clavar el cronómetro en 5,3 segundos. Sobre césped mojado tardó 5,5”.
Luego llegó el momento del barro, sobre el que necesitó apenas 6,5 segundos para el 0 a 100. En la arena fue un segundo más veloz: 5,5”. Sin embargo, la superficie más exigente fue la nieve, ya que ofrece menor capacidad de tracción. Allí aceleró en 11,3 segundos, nada mal.
De esta manera, la marca inglesa quiere demostrar la versatilidad de su SUV de lujo y la capacidad de sus numerosos sistemas que ayudan a mejorar la tracción y lograr una altísima performance por donde se transite.
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