Actualmente la mayoría de las grandes marcas se están disputando el primer lugar para ver cuál de todas ellas va a ser la primera en ofrecer al mercado un vehículo de total conducción autónoma. A pesar de esta situación, todavía hay marcas que reniegan de ofrecer este servicio ya que no le ven mucha lógica para los tipo de automóviles que comercializan.
Este es el caso de Lamborghini, la casa italiana al aclarar que será la última automotriz en fabricar coches autónomos, se justifica al manifestar que no tendría sentido realizar un super-deportivo autónomo ya que se perdería la gracia de comprarlo y conducirlo.
Maurizio Reggiani, Jefe de Investigación y Desarrollo de la marca del toro analizó la situación. «Si compras un Lamborghini lo haces para divertirte y disfrutar de la conducción, entonces si hablamos de conducción autónoma real, creo que seremos la última marca en ofrecerla».
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