La tercera generación del SUV mediano del óvalo fue develada ayer en el viejo continente, con la novedad principal de incorporar una amplia gama de mecánicas, tres de las cuales serán híbridas.
Basado en la flamante plataforma C2 de Ford, que le permitió reducir su peso en unos 90 kilos, el Kuga podrá ordenarse en versión híbrida enchufable (2.5 naftero, de ciclo Atkinson, + motor eléctrico para sumar 225 CV), Mild-Hybrid (2.0 EcoBlue, diésel, de 150 CV + generador eléctrico) o híbrida autorrecargable (2.5 naftero, de ciclo Atkinson, + motor eléctrico, con tracción delantera o integral). Asimismo, también estarán disponibles variantes convencionales: 2.0 diésel (EcoBlue) de 190 CV y AWD, y 1.5 nafta (EcoBoost), de 120 o 150 CV.
Por otro lado, la nueva evolución creció en dimensiones (+89 mm. de largo y +44 mm. de ancho, aunque es 22 mm. más baja) para ser más confortable en sus plazas posteriores y estará configurada en tres acabados: Titanium, ST-Line y Vignale.
El primero podrá asociarse a llantas de 17 o 19″ y contará con difusor trasero, retrovisores en color carrocería y cubrecárter delantero. El segundo, en cambio, es el más deportivo y está inspirado en los productos firmados por Ford Performance, por lo que incluirá un gran spoiler trasero y escapes deportivos, entre otros elementos que le imprimirán un tinte más racing. Por su parte, el Vignale será el más lujoso por adoptar terminaciones exclusivas en aluminio satinado, tapizado de cuero Windsor y paragolpes de diseño distintivo. Al ser una las opciones más equipadas también poseerá un extensísimo equipamiento de tecnología y seguridad.