Tal como sucedió meses atrás con la octava generación de la Hilux, Tailandia y Australia fueron los países en donde se develó la SUV grande derivada de la chata japonesa; a fin de año comenzaría a producirse en el país.
Se trata de la sexta generación de esta exitosa SUV que en Argentina (aun se vende la quinta) se ubica por encima de la RAV4 y cuya última novedad data de 2014 cuando actualizó su equipamiento.
Por el lado de las dimensiones, tiene un largo de 4.795 mm, un ancho de 1.855 mm, un alto de 1.835 mm, una distancia entre ejes de 2.745, y un despeje del suelo de 225 mm. En él podrán viajar cinco o siete pasajeros (2+3+2).
La gama de motores es nutrida y tendrán distintas opciones de cajas. En total, son tres: 2.4 turbodiésel de geometría variable de 150 CV (a las 3.400 rpm) y 400 Nm (entre las 1.600 y 2.000 vueltas) de torque que se asocia a una caja manual de cinco velocidades; 2.7 naftero de 166 CV (5.200 rpm) y 245 Nm (4.000 rpm), asociado a un cambio manual de sexta; y un 2.8 turbodiésel de 177 CV (3.400 rpm) y 450 Nm (entre las 1.600 y 2.400). Esta última cuenta con una variante manual de seis marchas o automática, también de sexta.
Habrá que esperar las configuraciones locales, pero en Tailandia ofrece entre otros elementos, pantalla TFT integrada a la consola de 7 pulgadas con reproductor de DVD, MP3, GPS y cámara de visión trasera; ocho ajustes eléctricos del asiento del conductor; levas al volante; tapizados de cuero; portón trasero eléctrico; faros delanteros y traseros de LED con luces diurnas del mismo tipo; llantas de aleación de 18″; spoiler trasero y antena de radio en forma de aleta de tiburón. En seguridad, doble airbag frontal, de cortina, laterales y de rodilla para conductor; control de estabilidad y de tracción; estabilizador de remolque y asistencia en ascensos y descensos de pendientes.
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