Probamos al 4×4 más potente de la marca alemana. Alcanza los 421 caballos de fuerza y mantiene un diseño fiel a su historia. Su precio es de 229.000 dólares.
Históricamente es difícil encontrar vehículos que conserven un diseño similar al de sus primeras versiones. En este caso el Clase G 500 es fiel a sus inicios y va por más, agrega detalles vintage combinados con tecnología de última generación que resultan ser un combo ideal para aquellos que apreciamos los detalles que nos hacen volver en el tiempo.
Este mini tanque se presentó hace casi 40 años y sigue conservando un estilo con trazos cuadrados muy parecido al de un Jeep Wrangler. Ambos poseen trompas similares y generan una sensación de potencia y seguridad en la conducción.
Combina robustez y fortaleza con la tradicional idea de la marca alemana en imprimir lujo y elegancia en sus productos. Si bien ambas características se pueden apreciar con mayor precisión en otros automóviles, en el Clase G 500 es suficiente para hacer un vehículo difícil de definir. Es un ejemplar único tanto por su diseño interior y exterior.
Diseño:
Cuenta con dimensiones extremadamente amplias: 1.867 mm de ancho, 1.954 mm de alto y 4.663 mm de largo con 235 mm de despeje del suelo. Una vez que tenemos en cuenta estas medidas para acceder al habitáculo hay que subir al vehículo, literalmente es muy alto su despeje desde el suelo, lo cual luego, produce una postura de manejo amplia y seductora.
Sus líneas son totalmente cuadradas, no generan agresividad pero mantienen un aspecto rustico que a la larga termina seduciendo. Además en este caso nos terminó de convencer su color negro metalizado.
La parrilla no es muy amplia e integra la estrella del logo de la firma en el medio de la misma. También añade faros Bi-xenón con regulación automática.
Si observamos la parte superior de este todoterreno nos vamos a deleitar con un muy bien pensado techo corredizo eléctrico. Al abrirlo produce una muy buena entrada de luz solar y sensación de dinamismo. Por otro lado sus llantas son de aleación AMG de 19 pulgadas.
Interior:
Al ingresar al habitáculo de este vehículo podemos notar que la tecnología prevalece. Extremadamente equipado. También podemos notar lujo y elegancia en las terminaciones de sus materiales. Posee revestimientos en fibra de carbono en la consola central, varios comandos en aluminio, plásticos blandos de excelente calidad, cuero sintético con costuras dobles y detalles en Alcántara.
Además es muy amplio (debido a su diseño cuadrado), en la parte trasera caben 3 personas robustas perfectamente y dispone de un buen espacio para estirar las piernas.
Las butacas están revestidas en cuero y son calefaccionables, tanto las de la fila delantera como la trasera, se regulan eléctricamente y guardan en la memoria 3 posiciones diferentes.
Al sentarnos en el asiento del conductor si miramos hacia abajo como este off-road es de transmisión automática vamos a encontrar dos pedales, el freno y el acelerador, los cuales cuentan con un diseño vintage que emula antiguos pedales de versiones pasadas. Es un viaje en el tiempo que nos hace disfrutar de la combinación de lo antiguo con lo moderno.
Siguiendo ubicados en el asiento del conductor con girar la vista de forma leve hacia nuestra derecha vamos a observar la pantalla multifunción del Clase G 500, colgada de la plancha central. La misma tiene un diseño tipo tablet, lo cual la hace ver muy moderna y a tono con la alta tecnología que presenta el vehículo. Esto ya es norma en la mayoría de los Mercedes-Benz actualmente. Se controla con un pad como el de una notebook, el cual es sencillo de aprender a utilizar y con el paso del tiempo este aplicativo se vuelve una costumbre difícil de abandonar.
Motor:
Incluye una única motorización disponible y es extremadamente potente, se trata de un enorme V8 que es capaz de alcanzar 421 caballos de potencia y 610 Nm de torque. Se acopla a una caja automática secuencial de 7 marchas denominada 7-G Tronic.
Además cuenta con una caja reductora que se activa al oprimir un botón que se encuentra en la misma caja de cambios, este permite bloquear los 3 diferenciales, central, trasero y delantero.
De esta manera todas las ruedas comienzan a recibir la misma fuerza del motor y a girar a la misma velocidad, Ideal para superar obstáculos en ruta o pendientes complicadas.
Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,9 segundos y su velocidad máxima es de 210 kilómetros.
Equipamiento:
Con varios aplicativos tecnológicos, el Clase G 500 incluye climatizador de 4 zonas, pantallas multimedia en los asientos traseros para los pasajeros más pequeños, butacas calefaccionadas y un cómodo techo solar, el cual no se distingue a simple vista porque es metálico. Permite una amplia entrada de luz y es un detalle muy coqueto. Tanto el volante como las butacas y los apoyacabezas tienen memoria eléctrica, además los asientos traseros son rebatibles. Por otro lado, hay que decir que este vehículo no añade navegador satelital.
A la hora de estacionar nos entrega una muy cómoda cámara trasera con ayuda de estacionamiento y cuenta con retrovisores abatibles electrónicamente.
Seguridad:
Sin dudas que la marca alemana se esforzó por producir un vehículo muy seguro y el resultado está a la vista. Si bien las sensaciones de potencia y firmeza son notorias, estas van de la mano con la seguridad que nos entrega el automóvil, ya que a partir de ese punto es donde podemos comenzar a soltarnos en el manejo del mismo y dejarnos llevar por sus prestaciones.
Entonces el clase G 500 incluye de serie: 6 airbags junto con anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles, frenos ABS, BAS y EBD, controles de estabilidad y de tracción, apoyacabezas delantero Neck-Pro, monitoreo de presión de los neumáticos, claramente pensado para circular de la mejor forma por todo tipo de terrenos.
Conducción:
Al utilizarlo en ciudad notamos que es un auto pensado para disfrutar del confort de marcha que nos brinda la marca alemana. A pesar de tu voluptuoso tamaño se mueve con son soltura y por momentos olvidamos que estamos subidos a un vehículo tan grande y robusto.
Nos permite acelerar con seguridad y en las curvas, es muy estable y practico. Quizás es algo incomodo si hay que maniobrar en lugares estrechos ya que el radio de giro es corto. Eso sí, a la hora de pasar por lomas de burro o sobre imperfecciones del asfalto jamás nos enteramos, es un verdadero lujo en estas ocasiones
Apenas comenzamos a manejarlo sentimos algo de temor por acelerarlo a fondo ya que la respuesta de su motor es inmediata, al pasar los primeros minutos dentro del auto notamos su inmejorable confort de marcha y dejamos de sentir esa brusca aceleración para disfrutar de su andar.
La permanente sensación que nos aportó fue la capacidad de que podría superar en velocidad (en pocos segundos) a cualquier automóvil que estuviera hasta 300 metros delante de nosotros. De hecho así fue.
En terrenos off-road pudimos apreciar las aptitudes de este vehículo en su máxima expresión. Desde sus entrañas fue diseñado para lograr un buen funcionamiento en caminos difíciles. Cada posible dificultad que pudiera llegar a preocuparnos fue superada con éxito por parte de este mini tanque. Con una tracción perfecta y el sobresaliente funcionamiento de la caja reductora no hay terreno que pueda hacerle frente a este auto.
Conclusión:
Seguramente al comienzo no es un vehículo que nos llame mucho la tención pero con el correr de los minutos al utilizarlo es capaz de convencer hasta al conductor más riguroso. A la larga nos enamora a todos.
Con un diseño “old school”, lujoso y equipado con las últimas tecnologías y capaz de sobrevivir a cualquier terreno entregando satisfacción al conducirlo, a pesar de alto valor económico, el Clase G 500 está lejos de ser una compra caprichosa. Es en realidad una muy buena adquisición para aquellos usuarios que se identifiquen con un estilo vintage, disfruten del lujo y puedan aprovechar totalmente de todos los aplicativos de este auto.
Precio:
Su precio es de 229.000 dólares con una garantía de tres años y sin límite de kilometraje.
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